Una señal en lo alto del cielo se aprecia para enseñarnos el verdadero amor de quien por nosotros sufrió. Es el triunfo de los vencedores, de los fuertes. la Cruz es el signo de esperanza y de amor. Portar este signo, es llevar cosigo parte de la vida cristiana y recordar siempre que Cristo la cargó en su espalda y fue elevedado en lo alto, desde donde nos hizo a todos miembros de una única familia, la Familia de Dios, un Dios que es Padre, Hijo y Espíritu Santo, un Dios que es Amor y que nos invita a vivir en plenitud su Amor.
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